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En 1996 Katrin Rohde, propietaria de una gran librería en el norte de Alemania, lo abandonó todo y vendió todas sus propiedades para instalarse en Ouagadougou, capital de Burkina Faso, uno de los países mas pobres de África.
Un viaje anterior que la había llevado a ese continente la dejó tan impresionada que decidió cambiar por completo el rumbo de su vida y dedicarse a ayudar a los niños de la calle de Burkina Faso que llevan una existencia miserable entre el hambre, las drogas y la delincuencia. Lo que empezó como un pequeño proyecto personal se ha convertido con los años en una sólida organización que cuenta con la ayuda de muchas personas solidarias dentro y fuera del país. Hoy Katrin es conocida como Mama Tenga, «Madre Patria», y se ha convertido en la fundadora de AMPO, organización que cuenta con toda una serie de instituciones para niños y adolescentes, desde talleres basta centros de formación o consultorios.
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